La época universitaria es sinónimo de aprendizaje. Y no solo académico, sino también vital. Se trata de una experiencia que, de alguna u otra manera, deja huella en todo aquel que la vive. Es diversión, es superación, es cometer errores. En algunos casos supone cambiar de lugar de residencia y llegar a un entorno en el que probablemente nada vaya a ser como hasta este momento. Estas son algunas de las cosas que aprenderás en la universidad, pero sin leer ningún apunte…
- En la universidad te encontrarás con gente de todas las nacionalidades y culturas, con formas de pensar y vivir que probablemente no se parezcan a las tuyas. Es importante tener la mente abierta pues todos ellos tienen mucho que aportar. No juzgues sin saber ni conocer a las personas, ya que muchas veces la primera impresión puede no ser la más acertada. Seguro que te conviertes en una persona más tolerante y receptiva a lo desconocido.
- Te tocará aprender a vivir en un mundo real. Sobre todo si sales de tu casa, ya vivas en un piso en una residencia, es el momento de salir de tu zona de confort y adentrarte en una realidad distinta a todo lo que conocías. Tus compañeros de clase o de piso o residencia, tus profesores, una nueva ciudad, la soledad… Todo lo que te rodea te servirá para vivir esas experiencias enriquecedoras que te harán crecer como persona.
- Sabrás ser independiente. Más que nada porque no te queda otra… Pero es algo que tienes que experimentar durante este proceso de aprendizaje. Tu familia seguramente esté lejos, tus amigos de siempre tampoco te acompañarán, así que toca ponerse las pilas, estás solo y saldrás adelante. ¡Hay mucha gente interesante por conocer!
- Aprenderás a trabajar en equipo. Sobre todo en determinadas carreras los trabajos en grupo son muy habituales. Deberás saber adaptarte a todas las personalidades de los integrantes, escuchar sus opiniones, saber expresar la tuya… Todo ello siempre con respeto, madurez y aptitudes de liderazgo, algo que te será de utilidad, también, de cara a tu futuro profesional.
- De los errores se aprende. Es una de las cosas que más claras te van a quedar durante esta etapa de tu vida. Porque te equivocarás una y mil veces, pero lo importante es desarrollar la capacidad de superarse y continuar adelante tras haber tropezado, adaptándose a la nueva circunstancia y sacando el máximo partido al error cometido.
