Sabemos que la parte teórica está muy bien, es necesaria e imprescindible, claro, pero también los aspectos prácticos son fundamentales para una formación completa y de calidad. Por eso, realizar prácticas en empresas durante el tiempo que duran tus estudios, o una vez los hayas terminado, tiene muchas ventajas para tu desarrollo personal y profesional. Resumimos las principales a continuación:
- Adquieres experiencia profesional en un entorno real. Esa experiencia, además, de servirá de cara a futuros procesos de selección en los que la pidan como requisito. Tu currículum comienza a crearse.
- Será tu primera toma de contacto con el mundo laboral y te puede abrir muchas puertas de cara a un futuro, pues quizá de esas prácticas surja un contrato de trabajo.
- Desarrollarás habilidades que quizá desconocías que tenías o que necesitabas potenciar. Adquirirás otras nuevas y también muchos conocimientos que son vitales para acceder a un empleo. El proceso de auto conocimiento ha comenzado, pudiendo empezar a identificar tus puntos fuertes y aquellas debilidades sobre las que tienes que trabajar más a fondo.
- Aprenderás a trabajar en equipo y a formar parte de una empresa u organización. Sabrás qué comportamientos son los más apropiados en determinadas situaciones y conocerás qué se puede esperar de ti en un entorno real de trabajo. Y descubrirás cómo reaccionas tú ante ello.
- Dentro de estas prácticas estableces contactos interesantes con personas vinculadas a tu sector profesional. Es importante que cuides las relaciones porque puedes necesitar alguna recomendación en un futuro o quizá te puedan abrir las puertas para un puesto de trabajo. Sin contar que quizá hsta hagas amigos.
- A veces las prácticas te vendrás, digamos, dadas, con la formación que estés haciendo. Pero, en otros cosas, deberás buscarlas tú mismo. Es una manera de aprender, también, a buscar trabajo más adelante, sabiendo redactar un currículum, sabiendo cómo afrontar entrevistas de trabajo… Y si en algún momento caes en errores, estás a tiempo de subsanarlos.
- Y, como te decía antes, en el mejor de los casos, y esto ocurre, estas practicas en empresa se pueden convertir en un contrato de trabajo. Si demuestras lo que vales, si sacas a la luz tu potencial y tu valía, pueden ofrecerte un empleo; ya te conocen, saben cómo trabajas, te han visto desenvolverte en situaciones reales, ¿quién mejor para ocupar ese puesto? Ocurra como ocurra, aprovecha al máximo la oportunidad, pues de ella sacarás siempre un montón de cosas positivas.